Un capricho como despedida en el último día de trabajo. En lugar de aprovechar ese momento para criticar al jefe o a aquel compañero que te ha hecho la vida imposible, este empleado de Twitter se dio el gustazo de desactivar la prolífica cuenta del presidente de EEUU. Eso sí, la jugada sólo duró 11 minutos.
La compañía justificó en primer lugar que se había tratado de un «error humano». Sin embargo, horas más tarde tuvo que rectificar y revelar la realidad de lo ocurrido. «Nuestra investigación revela que fue llevado a cabo por un empleado de servicio al cliente de Twitter en su último día de trabajo. Estamos llevando a cabo una revisión interna total», ha indicado Twitter en su cuenta en la red social.
Horas antes, la compañía señaló que la cuenta de Trump fue «desactivada sin querer» debido a un «error humano» de un empleado de la red social. «La cuenta @realdonaldtrump fue hoy (por el jueves) desactivada sin querer debido a un error humano de un empleado de Twitter», dijo.
«La cuenta ha estado desactivada durante once minutos, y ya ha sido activada. Seguimos investigando y estamos tomando medidas para evitar que esto pase de nuevo», zanjó.