
«Parecen monstruos». Así reacciona Jordi Évole durante la visita furtiva a una granja de la región de Murcia donde se hacinan decenas de cerdos en un estado deplorable: animales llenos de úlceras y malformaciones, moribundos, agonizantes, comiéndose unos a otros… Algunos aparecen muertos en contenedores porque no han llegado vivos al matadero. Dantesco.
“He entrado en muchas granjas y nunca había visto algo así”. @IgualdadAnimal denunció el caso particular de esta granja y les acompañamos a documentarlo. #SalvadosGranjas pic.twitter.com/SYfrFShPdl
— Salvados (@salvadostv) February 4, 2018
Es una visita que ‘Salvados‘ realiza en colaboración de la oenegé Igualdad Animal para denunciar las prácticas lamentables en esta granja que suministra su carne a Cefusa, empresa perteneciente a El Pozo. La firma cárnica ha divultado un comunicado en Twitter en el que afirma tajamentemente: «Es imposible que animales como los mostrados en ‘Salvados‘ entren en nuestra cadena producción».
Los animales que aparecen en las imágenes del reportaje jamás entrarían en la cadena alimentaria española al contrario de lo que se deja entrever en el programa pic.twitter.com/bqD5dnq66o
— ElPozo Alimentación (@ElPozoAlimenta) February 4, 2018
Évole ya había avisado antes de la emisión del programa, titulado ‘Stranger pics‘: «Hemos tenido que asaltar una granja porque ninguna nos quería abrir las puertas». Su propósito, tal como avanzó este diario, ha sido hacer un programa sobre la industria cárnica.

Tras visitar la granja murciana, Évole se entrevista con Francisco José González Zapater, director general de Ganadería de la Región de Murcia, que ha rechazado tener ninguna responsabilidad pese que a su departamento hace inspecciones y ha intentado tranquilizar a los consumidores alegando que toda las carnes que llegan a las tiendas han pasado los controles que marca la normativa europea.
"-¿Qué responsabilidad tiene su administración?
-Ninguna."#SalvadosGranjas pic.twitter.com/9zEuftqqGu— Salvados (@salvadostv) February 4, 2018